Hola Amigos,
Más allá de los logros concretos que podamos haber obtenido con la marcha Salvemos Barranco del 4 de Febrero - cambio de rutas, limitación de líneas de transporte público, implementación de todas las vía de la Avda. Bolognesi y puesta en uso del Corredor Metropolitano desde ya, y el logro de un estudio técnico urbano y vial específico para nuestro distrito con la participación de Ingenieros y Arquitectos Barranquinos que nos representen ante la Municipalidad de Lima y Pro Transporte – no creen que es esencial reconocer que se ha logrado algo mucho más grande: la toma de conciencia del derecho que asiste a cada ciudadano a expresarse con libertad para no permitir el abuso y atropello de las autoridades?. Quizás es el despertar de un letargo ciudadano anestesiado por la desidia que permite que el desorden se instale, indiferente a su condición esencial de miembro de una comunidad con deberes y por lo tanto capaz de reclamar sus derechos. Es el rescate de su dignidad porque los tiempos enseñan que no es posible sostener este tipo de humillación colectiva.
La acción organizada que nos propongamos - pues este seguramente es el inicio de una serie de restituciones pendientes - la queremos ejecutar sin ambiciones ni intereses ajenos al bien común que ahora reclamamos: nuestro derecho al buen vivir y el respeto y validación del patrimonio natural, social y cultural que han caracterizado a Barranco por tantos años. Y aún cuando la distancia entre la enunciación (lo prometido) y la puesta en práctica es todavía grande, la podremos superar porque aprender a protegernos y a proteger el patrimonio supone un proceso educativo en el que la información y la comprensión son fundamentales para despertar las conciencias. Sabemos que Barranco cuenta con un patrimonio intangible que engloba las representaciones, expresiones culturales, memorias de personas y grupos que son practicadas desde siempre. No podemos separar este patrimonio tangible- intangible porque ambas caras dan cuenta de la identidad barranquina.
Reclamemos también el derecho no solo a revivir y mantener nuestra cultura local, y cuando ésta tenga que pasar por procesos de ‘modernización’, que éstos no tengan lugar poniendo al ciudadano al servicio de logros materiales, sino por el contrario: que ellos nos aseguren la ruta al logro de una sociedad civilizada de primer mundo donde, por sobre todo, prime el derecho y respeto a la vida propia –en todos sus aspectos – y el de la vida de los demás dentro de un orden establecido, donde no gana el vivo y “acriollado” sino el respetuoso de las normas, los turnos, y el que no elude la transparencia cuando ostenta el poder. Es esto acaso mucho pedir???
M. Elizabeth Silva V.
DNI 08260301
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